PANCHO SE ACLIMATA O SE ACLIMATA... GAVILÁN O PALOMA
Ya se quería saltar las trancas,
el bohemio Pancho Herrera. Pensaba, a lo mejor, que estando en la delegación de
SAGARPA, podía jugar a las vencidas con el gobernador del estado. Pero no, las
cosas llevan un cauce natural, al cual debe adaptarse y ceñirse, para
consolidar no a un gobierno perredista, sino a un gobierno estatal que junto con
el gobierno federal, camina de la mano de los tabasqueños.
Y aunque el delegado de SAGARPA en
Tabasco, ha sido un tanto rebeldón, pues ha querido hacer las cosas a su manera,
y creyendo, a lo mejor, que la posición que ocupa le da un aire de gobernadorcito,
empezó a creerse más, de lo que no es. Solo por citar un ejemplo, podemos
mencionar, que al llegar Francisco Herrera a la delegación federal, lo primero
que hizo fue cambiar el padrón de beneficiarios que ya se tenía en la entidad,
aun cuando la lista viene de México, dando para abajo a quienes ya esperaban su
beneficio.
Es decir, Pancho Herrera llegó
con el machete desenvainado, y pintó su raya, con el gobierno del estado y con
todo aquello que oliera al mismo. Las quejas, obviamente no se hicieron
esperar, y aunque todo pintaba que aquello acabaría mal. Resulta que el día de
hoy en el marco del programa concurrente, y en la casa de los Productores
Tabasqueños, se le vio manso, y domesticado junto al gobernador, entregando
recursos y apoyos a los productores del estado.
¡Ah! Y no solo eso, de igual
forma, tuvo a bien saludar, e igual estrechar sino lazos, si la mano, del
actual presidente de Centro, Gerardo Gaudiano, es decir, el caballo cerrero,
doblo las patitas, pero no en señal de rendirse, o queriendo redimir su corazón
arrecho, sino institucionalizándose, viéndose respetuoso y civilizado con la
autoridad del estado, insisto, por si alguien no lo ha entendido aún, la
autoridad en el estado.
Al final, el delegado de SAGARPA,
tal parece entendió, o le hicieron entender, que el ostentar el cargo, o mote
de delegado federal, es para coadyuvar en el fortalecimiento y desarrollo de
Tabasco. Ya no de un partido político, de una corriente, o de una tribu, sino
de Tabasco. Así se ha puesto en claro desde la altiplanicie federal, así lo han
entendido los demás delegados, y así, tal parece, deberá ser. A no ser, claro,
que el amigo Pancho Herrera, esté agarrando impulso, para salir dando reparos
como los Toros de Rodeo. Pero, ya veremos dijo un ciego y lo llevaban jalando.