MIENTRAS VIENE BENITO… ADY Y NICOLÁS MÁS ALLÁ DE GINA
Mientras que llega Neme, es
sensato y justo el reconocer que Nicolás Bellizia y Ady García, son en el PRI
la sensatez, el bálsamo y la chispa.
Tanto Ady, como Nicolás, han ido
al encuentro con la ciudadanía, han ido al encuentro con la sociedad
tabasqueña, y han rebasado por mucho las expectativas que en un momento se les
tenía.
Ady y Nicolás, se atrevieron a ir
más allá de los limites que hoy tienen obstaculizado al PRI Tabasco, se
quitaron viejos prejuicios, que otros se atreven a llamar la clase política del
partido, y se dispusieron ir a dar la cara a la ciudadanía, y el resultado de
ese trabajo, de ese esfuerzo, hoy tiene su recompensa.
Tan es así que digan lo que
digan, le duela a quien pudiera doler, están posicionados y se ven fortalecidos
para ir por una candidatura al gobierno del estado.
¿Por qué ellos crecieron y por
qué Gina no?
Mucho tiene que ver que Gina no
supo o más bien no sabe lidiar con la competencia interna. Se le imposibilita el consensar, el bajar, el
trabajar en torno a la unidad. Eso mismo ha provocado cierto rechazo, el cual
le ha pesado, hasta el momento.
Por si fuera poco el cordón umbilical
que tiene Gustavo de la Torre con la imagen de Gina Trujillo, es un yunque que
no puede quitarse de encima, la diputada federal. Los errores y caprichos del
dirigente estatal dañan y hace retroceder de pasito en pasito la figura de una
dama muy preparada, que tiene experiencia y está actualizada, pero a quien
posiblemente le hace falta un poco menos de rigidez, y mucho más flexibilidad
en el oficio político.
Gina se deja seducir por el canto
de las sirenas, es decir cree que la clase política es lo que necesita y basta,
y no es así, ya no es así. Ady lo sabe, Nicolás ni se dude.
No, nos extendamos, en este tema
que es ya treiding topic entre el priismo tabasqueño, lo cierto es que mientras
termina de llegar BENITO NEME, el cual para muchos llega en septiembre, otros
según dicen en octubre, los más calmos aseguran que bajará del monte Olimpo como
en diciembre, pero, lo cierto es que hoy, por hoy, y sin el enfermizo negocio
de las encuestas, he de decir que hay un clamor, hay un palpitar en el priismo,
y está en caminado hacia Ady y Bellizia, quienes en estos momentos, tienen el
respaldo de la militancia, de la sociedad media, alta, y jodida, tienen la
anuencia de los priistas de a pie, de las corrientes despechadas, de las almas
en pena, que deambulan de un lado a otro en el PRI de Gustavo y Gina, sin
encontrar consuelo a tanta infamia. Aunque no sé si voy bien o me regreso.