UN LLAMADO A LA CORNUDA DIGO CORDURA
Pastor de Ovejas Pintas Román Jiménez
En verdad en el PRI ya se perdió todo hasta la dignidad que tanto cuidamos
en su momento Jacinta, Clerida, Nelly Jiménez y yo.
Es un shishero en donde abunda el enfrentamiento, la barbarie, la ofensa,
el desprestigio y el rencor. Ya no hay aportes al pensamiento, ni tampoco
existe una idea clara de lo que se busca o quiere.
Pienso luego existo que el PRI Comalcalco, como otros priis que hay dentro
de este partido ha sido vilmente obstaculizado, vendido y vencido.
Se acabaron los tiempos de política, que aunque usted no lo crea
existieron, en donde se podía increpar, estar en desacuerdo pero era más que
lógico que al final eran todos un solo partido.
Hoy no es así, las redes sociales que para algunos no son sociales sino
redes de guerra o encono han transformado la crítica y la libertad en suculentos
manjares para despotricar y saciar esa sed algunos de venganza, otros de rencor
social.
Nadie se salva, incluidos los pobres periolistos que no se meten con nadie
cuando están durmiendo, es el secuestro de la consciencia, de la razón, de las
ideas, por métodos egocéntricos, sordos, inauditos de palabras burdas, grotescas
y coléricas.
Obviamente amable lector, lectora, dicha argucia es perjudicial, no ayuda
en nada, menos si son del mismo partido, lo que si provoca es polarizar no solo
un partido, sino muchas veces una familia o una amistad, por eso creo esto ya perdió
toda proporción, pues todavía se puede entender si se realiza desde una postura
un poco más “revolucionaria” o de un tinte que parezca de mayores dimensiones.
Pero andarse enlodando, peleando, desgreñando por un aspirante es una
bajeza que lastima no solo a la persona que cae en este lamentable hecho sino
también a su círculo de amistades y muchas veces cala hasta en lo familiar.
El fanatismo para nada es bueno, es reprobable, es lo abominable de una
mala política, de una politiquería barata, obsoleta y denigrante.
Ya que se debe tomar en cuenta que si el aspirante, candidato o político
tiene enemigos, son enemigos de él, no de quien simpatiza con su proyecto. Hay
que saber igual como ciudadanos que el poder solo dura 3 o 6 años, y que las
heridas que vayamos dejando en el camino, serán resueltas por nosotros mismos,
no por el aspirante, es decir que nadie meterá las manos por nosotros, tan es
así que nuestros detractores o supuestos enemigos son nuestros, tan nuestros
como la existencia, y que no hay político que se enemiste con la materia prima
que son los votantes, entonces por qué nosotros sí, no somos políticos quizá pero tenemos dignidad y somos parte del pueblo, de la gente.
De tal manera urge, pues aún estamos a tiempo que se privilegie la razón,
que se salve algo en cuanto a lo moral, a lo ético, a lo esencial en el PRI,
pues a como van se percibe la derrota, en donde perderán todo, y creo lo
rescatable en este barco está bajo preceptos olvidados que deberán ser por lo
menos dignificar la lucha, el partido y la manera de hacer política.
Esto no quiere decir que todos nos agarremos de las manos y cantemos el
himno de la alegría, pero sí por lo menos haya un conocimiento y seamos cuerdos y nos fijemos dónde estamos parados, en un terreno tan escabroso en donde lo que queremos sembrar se pierde, mejor dicho no se puede echar raíces en arenas movedizas.
Hemos confundido como ciudadanos nuestro papel, hemos dejado de confiar en nosotros mismos, hemos privilegiado el engaño, hemos dejado de ser reales, y nos hemos dejado manipular por la necesidad.
Hemos confundido como ciudadanos nuestro papel, hemos dejado de confiar en nosotros mismos, hemos privilegiado el engaño, hemos dejado de ser reales, y nos hemos dejado manipular por la necesidad.
A lo mejor en estos momentos estemos ciegos, y creamos que lo que hacemos
lo hacemos bien porque nos palmean la espalda, pero mañana, mañana esa palmada
serán azotes y nos descubriremos esclavos y seres sumergidos en la miseria.
Yo Mancho Jiménez lo escribo porque
lo he vivido, porque como seres humanos buscamos mejorar, pero no todo lo que
brilla es oro, y siendo aún más honestos, en una lucha para ver quien grita más
fuerte, quién ofende o lacera más hondo no existen victorias, ni reconocimientos,
solo una inmensa soledad y de pasada el gran abismo de la mediocridad y el
miedo.
Por lo mismo vayamos actuando conforme a derecho, no implica repito dejar
de pensar de manera crítica, pero necesitamos querernos, respetarnos, para hablar o escribir sin inmutarnos, para
dejar de ponernos en los zapatos de los políticos, para dejar el fanatismo y
enderezar la cordura, en un mundo, en un país, en mi querido Comalcalco en donde
el progreso ha llegado en base al trabajo de la gente, de la ciudadanía, de
quienes formamos parte de esta hermosa tierra, la política es necesaria, claro
que lo es, pero depende enteramente de nosotros.
Vayamos haciendo las paces con nosotros mismos, vayamos bajándole dos
rayitas a nuestro egocentrismo, y veamos las cosas como son, y como una vez leí
no sé donde, pero me quedó bien grabado, vivamos la vida de tal manera que
cuando nuestros hijos lleguen a tocar las puertas les sean abiertas. Prediquemos con el ejemplo... y ustedes se preguntarán por qué busco la tregua, pues aquí entre nos porque ya me anda cerquita ja, ja, ja, iche. Aunque no sé si voy bien o me regreso.