Grabur y Jaime: EL REENCUENTRO
Lic. Román Jiménez
Como un pijulito
empapado de agua andaba este su servidor entre los escombros de la credibilidad que se
ha vuelto el congreso del estado.
Había llegado
tarde al show del congreso, pues el bocho modelo 94 en que ando, se le ocurrió
no caminar más, y se paró justo en Paseo Tabasco, en donde valientemente junto
con mis secuaces nos dispusimos a empujar dicho clásico a un lugar menos transitable,
pues nunca en la vida me habían recordado tanto a mi estoica y sufrida mamita,
llegué a creerme hasta un político de esos que dicen corren de las comunidades.
Aparcamos el
bocho y nos fuimos caminando para tomar podríamos decir, con aires de científicos,
o químicos, una muestra de ese caldo de cultivo que viene siendo el congreso,
el cual hospeda parásitos inmunes a toda vacuna o supositorio.
Antes de entrar,
voltee a ver la hora en mi celular y solo alcance a ver, antes que se me
apagara, pues igual sufrió los estragos de este día lluvioso “Interesante
plática con Jaime Hernández Córdova y Manuel S.Graniel Burelo”. Luciano Camero
Martínez.
Rápidamente me dispuse a averiguar lo que escribió el amigo
Luciano Camero en su muro, y luego de tanto ir y venir por fin pudimos armar
las piezas del rompe cabezas, y es podríamos decir la exclusiva que traemos
para todos ustedes.
Resulta que el día de hoy, el destino, “la suerte”, la vida,
hizo de las suyas, y en el café la
cabaña que está en el boulevard Leandro Rovirosa Wade, sentados estaban
hablando y bebiendo café Luciano Cámero y Jaime Hernández, cuando sin saberlo,
llegó el amigo Manuel Grabur, quien tenía una charla con otro ser humano.
Se encontraron de frente, a lo cual Manuel Grabur fue a saludarlos
y ante la insistencia de Jaime de sentarse a la mesa, comenzaron la charla, sin
intermediarios, sin padrinos, y a cómo debe de ser.
Con la virtud del dialogo, tal parece empezaron a limar
posibles asperezas que existiesen y a su vez sin querer hacerlo, dejaron demostrado
que son políticos maduros, que buscan consensar, la unidad, para llegar a su objetivo
a la alcaldía.
Este proceso de enamoramiento que llevan tanto Jaime como
Grabur, es bueno para el partido, igual para la política, pues demuestran que
más allá de los rumores, de los chismes que se ha generado en torno a ellos, al
odio que dicen se tienen, está su oficio político, su orientación a la razón,
para afrontar el proceso electoral del 2015.
De la misma manera ha de quedar establecido que este gran
ejemplo que pone Jaime y Grabur, debe ser tomado positivamente, pues a veces
los fans no entienden, que son los más sensibles o frágiles en este tipo de
choques infructuosos, pues el día de mañana quienes se decían se odiaban, se
sientan y solucionan sus conflictos, mientras a su paso quedan víctimas de la pasión.
Este es el inicio de una de tantas otras cosas más, que se verán
en estos meses, en donde de nueva cuenta quienes se dicen políticos vuelven a
encausarse a la unidad, luego de tanto brinco y ajetreo. Obviamente quienes
están chamacos en estos tenores, y que anduvieron despotricando y generando
odio y rencor, desfilarán como almas en pena y con la cabeza a gacha, pues
siempre es mejor ser prudente, que andar de manera fanática arremetiendo
sandeces en contra de quien se les pare en frente.
Celebramos pues que
por lo menos hoy se vea rasgos de un amanecer en el PRI Comalcalco, un PRI
Comalcalco enfermo y mediocre gracias a su dirigente Alexander, quien hoy debe
aprender de Manuel y Jaime como se hacen las cosas.
Por otro lado esperamos este romance sea de idilio y no de
tormento, y que logre pasar del mes. Seguiremos informando.