Crisis de identidad en el PRD... y otras penurias
Lic. Román Jiménez García
El existencialismo tan grande que
vive el PRD en Tabasco en estos momentos, es en base a los claroscuros de las
posturas de quienes siguen a Andrés Manuel López Obrador, pues aunque algunos
ya se encuentran definidos continúan tomando al Partido de la Revolución Democrática
como su tendedero de ropa sucia.
En sus comentarios realizados de
manera contradictoria algunos morenos perredistas, mencionan que se irán a la
cargada cuando el actual gobernador del estado se deslinde por completo del
PRD, y sea un Moreno más enfilado a la doctrina Obradorista.
Pero esa otra transición posiblemente no se
dé, pues hay sectores morenos en el PRD que creen que en Tabasco tiene más
poder Obrador que el mismo Núñez, por lo que esperan con ansías la llegada del
ex candidato a la presidencia de la república para informarle a detalle, uno a
uno los errores y faltas que tiene el gobernador, pues ha tomado en cuenta a
quienes de cierta manera, han sido contrarios a la pelea perredista. Contradicciones
de una batalla por fin ganada, por
quienes en apariencia perdieron.
Sin embargo esto nos viene, una
vez más, a afirmar, que Núñez y Obrador, no piensan igual, que no tienen la
misma visión, que son contrarios en su sentido de apreciación y praxis
administrativa y política, que solo los une o los unía su rechazo al régimen, a
todo el régimen por parte de Obrador, y por parte de Núñez solo a algunos
grupos en el PRI.
Ahora que ya se ganó, AMLO sigue
en contra de lo mismo, y ya Núñez luego del sabor de la victoria, se volvió más
filosofo, más benévolo, más buena gente, y busca mejoras, llevar a buen destino
su sexenio, el estado, ya no le preocupa el revanchismo, es más pareciera que
por momentos quisiera que el tema de los ladrones del estado pasará lo más
pronto posible, porque tiene que ver su obra, lo que va a dejar, su presente,
su futuro, pero sus aliados, sus apasionados, sus adoradores “AMLISTAS”, siguen
y siguen jodiendo con la cárcel.
Y ahí estamos, poco a poco empezamos
a abrir los ojos, el pueblo, el perredismo, los nuñistas, los periodistas, los
mismos administradores, que ven que el pueblo está a la altura de su exigencia,
pero que internamente, entre quienes integran el triunfo Nuñista y la
administración Nuñista (que son cosas inmensamente diferentes) continúan sin
comprender su responsabilidad y la perfecta dimensión de las cosas...
Pero las cosas no paran ahí...
Por si fuera poco Arturo Núñez
luego de que doblara las manitos, por la presión que realizara un grupo de
enfermeras encabezadas por Maribel Cruz López, puso endeble su autoridad. Y
todos los maleantes que se encargan de especular hasta de los frentes fríos que
entran a Tabasco, rápidamente vieron que ese recular de Núñez, era posiblemente
por la llegada de Peña y AMLO a tierras tabasqueñas, es decir no quiere
protestas, no quiere que se le diga nada a Peña, ni a López Obrador, y que por
muy fuerte que veamos a mi querido gobernador, tiembla, siente las embestidas
por pequeñas que sean, los golpes entran y pareciera que tira a ser noqueado.
Por lo pronto con lo que hizo dio
de comer a sus enemigos, y a sus miedos, pues su actitud o sometimiento, dejó
con ganas de arremeter a más de un sector político para hacer valer sus
peticiones o caprichos.
Lo lamentable de esto es que mientras todos
pensamos en el cambio, de que Núñez viene con intenciones diferentes, que es
una chulada, que no anda jugando, que es serio, justo e indestructible en su carácter,
en su autoridad, llega de un momento a otro una enfermera exigiendo, así como
lo lee y lo leyó en la información que se dio en los medios estatales y
locales, exigiendo al ejecutivo estatal, la titularidad de la dirección estatal
de Enfermería, pues ya había un acuerdo, insisto ya había un acuerdo de facto, en
donde sale a relucir el nombre del coordinador de asesores del gobierno del
estado Agustín Silva Vidal. ¡¡Hágame usted el favor!!
En lo particular en este medio
hemos tomado posiciones congruentes con la labor del gobernador, siempre hemos
tratado de dar los beneficios habidos y por haber al amigo Arturo Núñez, pues
creemos en él y en su experiencia, pero aquí, ¿cómo?
Si en este caso el mismo gobernador
perdió el control y no dijo nada, y lo que hizo fue que el 11 del presente mes,
dio, cedió, la jefatura de enfermeras del Hospital Gustavo A. Rovirosa a la
enfermera Maribel Cruz López. Un acto de justicia le llamaron... Pero en
realidad fue un acto que dejó mal parado al gobierno, y verse débil en estos
momentos no es ningún atributo, ni mucho menos un virtud.
Por si fuera poco dicha enfermera
manifiesta en defensa propia y del gobierno al que ya pertenece, que “el cargo no se trata de un amarre político”.
Un epitafio lapidario digno para estos momentos de populismo y sinrazones.
Es pues, que desde mi morralero
punto de vista, creo es necesario haya una comunicación fluida con el equipo
Nuñista, con su gabinete, con sus morenos perredistas, y poner las cosas
terminantemente claras, lo mismo se tiene que hacer con AMLO, hablar con
sinceridad, y arreglar posibles malos entendidos, por el bien de su mismo
gobierno, ya que hasta hoy, la gran batalla que Núñez y equipo tienen que dar
no es en contra del PRI, ni de los corruptos, sino internamente, pues si no se
toma especial interés a esos pequeños
tumores que van generándose en los primeros meses del sexenio, pueden volverse cancerígenos,
y acabar peor posiblemente Garnier.
Porque de algo estamos seguro hermano,
amigo, compadre y colega Arturo, en el poder no hay amigos, sino volteemos a
ver atrás y pongamos nuestras barbar a remojar. Pero no sé, si voy bien o me
regreso.