Desapercibido Erubiel en Comalcalco
Lic. Román Jiménez García
Más allá de fomentar
un favoritismo, lo cierto es que Erubiel Alonso Que, sigue a la cabeza del
grupo de candidatos al PRI estatal, es más el mismo discurso que Alonso Que maneja
es de quien sabe está dentro, y tiene que incluir, aglutinar, sobar, cicatrizar
posibles heridas o malos entendidos.
La posición de
Erubiel es Salomónica, no se mete a confrontaciones infructuosas, y cuando de
manera colateral le asestan un golpe, recurre a esclarecer de frente cualquier
tipo de mala fe.
Se percibe entonces amable lector, que hasta
el momento, no habrá vuelta de hoja, que Erubiel la tiene en sus manos, y que
tiene un reto enorme en el PRI, pero más con su estructura, con quienes le
tienden la mano, y se ve desde hoy, que no durarán en cobrarle el favor y
pasarle la factura.
¿Por qué mencionó lo antes dicho?
El día de ayer Erubiel Alonso estuvo en
Comalcalco y todo se dejó ver como una faramalla, un juego de espejitos y de preñados,
es decir, yo te preño y tú me preñas, pero al final quien pasó a ser plato de
segunda mesa fue el candidato de la cargada.
Porque al momento de mencionar, a Jaime, se
desató el griterío en apoyo a Chin Chun Chao, salieron pancartas en alusión a
la aspiración personal de este suspirante, y lo mismo ocurrió con Manuel
Grabur, mientras que pocos tomaban en cuenta a Erubiel, es decir el festejado
pasó a ser plato de segunda mesa.
Insisto, no lo digo por ocurrencia, sino
más bien porque se hizo patente en
Comalcalco el golfismo político que encarnaron mi hermano Grabur y mi otro
hermano Jaime, se volvieron protagonistas de su propia ignorancia y falta de
compromiso con el PRI, quizá, sin querer defenderlo, el que menos mal se vio
fue el grupo de Manuel Grabur, quienes se observo fuero agarrados de sorpresa,
por el bullicio que hizo la gente de Jaime, quienes hasta pancartas llevaban en
apoyo a las aspiraciones, repito aspiraciones personales de Jaime Hernández
Córdova.
Quizá antes cuando los procesos carecían de
sustento democrático, se hacía con el afán de mandar un mensaje al gobernador
en turno, o en su caso al mismo partido, dejando ver a todos con “humildad” que
era una expresión espontánea de lo que quería el priismo en esencia en
Comalcalco, pero a estas horas del partido, se deja ver como un acto vandálico,
una puñalada trapera, un valemadrismo de lo que pase dentro de esta institución
que los ha mantenido y sostenido todavía en pie.
No comprendió el dúo imaginó por su escaso
compromiso y capacidad de análisis que hoy es tiempo del PRI, de recomponer las
estructuras, no de fraccionarlas, ni confrontarlas, que los tiempos han cambiado, y el proceso
del mismo modo, y que las energías del partido deben estar encaminadas en pro
en este caso de su candidato.
Prefirieron exhibir su falta de tacto
político, y demostrar con un egocentrismo terrorífico que el mundo se mueve
entorno de ellos, que el PRI son ellos, y que los demás son sus albaceas.
Por el lado de Erubiel Alonso, ayer apenas
despertó del engaño, utilizaron su llegada para hacer campaña, fue salvajemente
exhibido como un líder deslucido y desteñido, que no puede con sus aliados
internamente, que no la tiene tan segura, que esto puede dar un viro si en
estos días no jala las riendas, que parece no tiene.
Hoy Grabur y Jaime, nos han enseñado una
vez más como se tropiezan los políticos solitos, como tienden al suicidio, como
derrumban todo y a todos con tal de saciar su necesidad de poder, y luego en la
retirada del candidato los rumores. “Solo llegamos 71 consejeros de 300, la demás es gente de Jaime y Grabur”.