Nuevamente el convivio del Magisterio
Por Lázaro López León
Saludos
agradables lectores; ahora es cuando se requiere el descanso después de una
ardua labor dentro del Magisterio, pues el proceso de enseñanza y aprendizaje
es por vocación pero igual cansado, eso sí, con resultados satisfactorios.
No
es la primera vez que el equipo del Magisterio logra convivir, claro, con
nuestros respectivos permisos y cumpliendo a cabalidad los trámites necesarios
con nuestras patronas del hogar.
Desde
temprano la fuerza del gozo y de la relajación empezaron a manifestarse, a
pesar de estar cerca entre nosotros (bueno algunos no), no se presta la ocasión
de convivir en forma de “relax”.
Bueno,
como les decía, desde temprano ya se hicieron presentes los chistes, las bromas
y también la poderosa información de ponernos al día (no es el chisme, eso es
otra cosa a la que no nos acostumbramos a dialogar).
Y
pos después de tanto viaje y “vuelteretas” en el carro, digo en el camino,
llegamos a nuestra localidad llamada “Las Tierras del Magisterio”, comento
nuestra, pero solo uno es el Patrón de poderosas y extensas tierras, tanta
hasta donde el ojo puede ver. Un gran terrateniente, quizás desde el porfiriato. ¡Jejeje!
Un
lugar con exuberante vegetación tabasqueña y con una fauna un poco rara y
extraña como la existencia de una can llamado oso y come pescado como un gato o
nutria… y es nuestro guardián, todo tigre.
En
el proceso de la preparación de “las asadas”, nos ganaban las carcajadas y los
gritos de las risas… además un vecino involuntariamente nos apoyó con unos
cantos angelicales que nos decidimos por bailar alzando las manos hacia el
cielo como diciendo: Gracias a Dios por estos momentos de algarabía.
¿Pero
qué platicábamos? Platicábamos la importancia de generar cambios en las
técnicas de estudio en el nuevo ciclo escolar para incluirlas en la Reforma
Educativa, sobre las propuestas que presentaremos en los Consejos Técnicos, uno
que otro realizó análisis sobre las marchas de la CNTE y su posible disolución,
y otras más… jiar jiar jiar me río con la mano, digo con la boca, como diría
alguien por ahí.
De
repente llegó una camioneta lobo, pensamos que era algún grupo norteño o la
reina del sur, pero era un colega nuestro, el jefe, para unirse al “relajo”.
Pero
no podían faltar los comentarios de nuestro estimado magister de las redes tecnológicas que se hicieron presente durante
todo el convivio y que nos hacían reír y reír…
Eso
sí no hubo nada, pero nada de cerveza, nada, ¡Aunque usted no lo crea! Ya que
para divertirse no es necesario la presencia de esa agua contaminada de
levadura… ¡Iche! ¡Isch caca!
Para
terminar en el convivio, uno que otro excelso, le ganó la indigestión, parece
que se llama gacho, tacho o pacho, lo bueno que no reventó, sino, solo
imagínese estimado lector…
No
hubo ninguna quemadura al asar las carnes sobre todo el maestro a cargo (la
cual observamos que le sabe a eso de las meneadas a la carne en el asadero), ni
un cortado… saldo blanco. 
Aprovechó
la ocasión para que el Director del Hijo del Chompipe, abriera su boca, y decir
que aparte del convivio, se celebrara su cumpleaños, la cual le manifestamos:
¡Felicidades! y cantamos el "sapo verde eres tú".
Mis
estimados les compartimos este pequeño escrito para hacer notar que no todo es
problema en la vida cotidiana, sino también, momentos agradables.
Saludos
y diviértanse sanamente en este periodo de receso escolar.
