AMLO EN DECLIVE
SE MENEAN LOS PILARES
OBRADORISTAS EN TABASCO
Sigue Andrés Manuel siendo como
siempre ha sido, no ha cambiado, es intolerante, es dictatorial, es
intransigente, no sabe dialogar, no entiende palabras y lo peor cree tener la
verdad absoluta, por sobre todas las cosas, y por sobre todo lo existente e
inexistente.
Esta vez lo vivió en carne propia
el periodista José Cárdenas, quien al cuestionarle sobre su posible vínculo con
Elba Esther, enfurecido y saliéndose de sus casillas Andrés Manuel acusó al
comunicador de calumniador.
Lo que siguió fue el
desmoronamiento del candidato de MORENA a la presidencia de la república, quien
al verse él mismo como un ser visceral, decidió terminar la entrevista entre bienaventurados
adioses.
De tal manera cabe mencionar que es imposible seguir defendiendo a
Andrés Manuel. Día con día su descredito crece, y sus errores se patentizan aún
más. Incluso los periolistos que estaban queriéndole llevar la segunda en
Tabasco, empiezan a recular y ser un tanto precavidos.
El fenómeno Andrés Manuel en el
estado igual pierde fuerza, máxime cuando MORENA en Tabasco se ha convertido en
una pista de aterrizaje del priismo tropicalón y dulzón que se niega a quedar
fuera de la jugada y quizá del presupuesto estatal.
¿Qué irán a hacer aquellos
priistas que andan de uña y mata, mata, con Adán? ¿Qué ocurrirá con esos
priistas que se fueron encampanados por el canto de las sirenas? ¿Dónde meterán
la cara esa gente cercana al gobernador de extracción perredista y corazón
priista que igual se fueron acarreados por el clamor nacional a MORENA?
En pocos meses se verá que cada
quién buscará salvar el pellejo, en pocos meses se verá volver a quienes con
sus arrebatos creyeron que la fortuna les sonreiría del otro lado del Espejejismo
político.
Es indudable que los beneficios
que oferta MORENA Tabasco en estos días son un sueño, una quimera que con el
pasar del tiempo se diluye por su discurso clasista y santón. Adán será el
candidato a la gubernatura, es innegable, a pesar que no levanta, a pesar que
su apuesta sea y es el fenómeno que pierde fuerza rumbo a la presidencia de la república.
Pero el golpe que sigue en MORENA
es la derrota que se anticipa en EDOMEX, ese bastión perredista, ese territorio
que muchos pensaban era de Andrés Manuel López Obrador, y por el cual el
partido amarillo había podido consagrarse, cuando no es así.
AMLO se desmorona y los efectos
llegan a Tabasco, en donde desde hace mucho ha ido perdiendo territorio, a pesar
de que sus fervientes fans intentan recomponer el camino, salvarán eso sí
algunas plazas, sin embargo la caída del mesías es inminente y si llegase a existir una investigación minuciosa de sus principales benefactores, no dudemos que el nuevo pirrurris de Comalcalco, Capulina May, puede ir hasta el bote. Las máscaras
empiezan a caer, justo a tiempo. A un año de la elección del 2018.