GINA VS ADY... FUEGO AMIGO O AMIGA
A veces la política no es
cuestión de géneros, pues como bien dice Ady García es la lucha por el poder y
se da tan rudo y tan fuerte como con los hombres.
Así
se empieza a ver con dos grandes mujeres de la política tabasqueña. Pues luego
de algunas declaraciones de una y otra, se puede concluir que solo la más
inteligente, madura y con mayor oficio político, saldrá con menos raspones de los que acarrea
la guerra sucia en cuestiones políticas.
Y
es que empezó la guerra sucia, y la agraviada en esta ocasión, fue la doctora
Ady García, de quien se estuvo manejando imágenes que degradaban a su persona,
o ese era el objetivo, pero no contaban con la
respuesta tan oportuna y de una dama, que con sutileza dio una tremenda
cachetada con guante blanco a los agresores que encima luego de tirar la
piedra, se escondieron, al interior de una y otra delegación federal.
Posteriormente
con la alegría que la caracteriza y sabiendo aprovechar los tiempos y las
formas contestó a través de sus redes sociales lo siguiente:
“Para los que están preocupados
de mi Extreme Makeover aquí es donde hacen maravillas, además uso la crema
" la Milagrosa". Soy Muy Femenina y me gusta. No coincido con que
algunas crean que para estar en la política hay que Masculinizarse”.
Posteriormente en el programa de
radio de Chuy Sibilla, fue entrevistada la doctora Ady García, y habló de la
campaña “Extreme Makeover” en donde se quiso dañar su imagen y que fue
orquestada en su contra, misma que
consideró “fuego amigo”.
Tan
amigo, y tan del PRI que mencionó dos delegaciones federales cercanas a Gina
Trujillo, y que son PROSPERA y FOVISSSTE, en donde presuntamente se diseñaron
dichos ataques.
Pero
la cosa, no termina allí, pues con la sinceridad que la caracteriza, también refirió que no había amistad con Gina
Trujillo, pero que a la vez, no creía que ella estuviera detrás de las fotos,
pues se trata de algo demasiado corriente para su estilo.
A
lo que minutos después Gina respondió a cuestionamientos hechos en el programa
radiofónico lo siguiente: Preguntan a Gina: ¿Ady García dice que de concretarse
tu candidatura al gobierno sería una imposición que no son amigas y que no te
apoyaría?- A lo cual Gina contesta: “Está en su derecho; ha ejercido ese
derecho en otras ocasiones con candidatos del partido; cada quien decide si
apoya o no a una persona”. Y además mencionó que ella no manejaba las cuentas
de las redes sociales de sus amigos de las antes mencionadas delegaciones
federales.
Todo
lo anterior, solo nos remarca que eso de pensar que las mujeres (todo el sexo
femenino) se van a unir en la política, creo es una falacia. Esto no quiere decir, que se demerite el
trabajo que algunas hacen, ese ejercicio de
alzar la voz para que los espacios se vayan abriendo poco a poco, por el
contrario, es aplaudible y también justo decirles que a veces en las luchas no
son reconocidos los iniciadores de los movimientos, es más puedo apostarles,
que ellos los iniciadores, son a veces los más criticados.
Pero
si hay algo que se le debe de reconocer a Ady García, es el ser sincera,
congruente, luchadora, pero sobre todo el mantener el lado “fashionista”, que caracteriza a una mujer, (a unas más que
a otras) ese lado sexy que una mujer no debe perder, más que nada, porque
representa el lado femenino, que puede diferenciar a una fémina de un hombre,
más ahora que hay una lucha por la equidad, es bueno que haya algo que
diferencie a cada sexo.
Ser
femenina, no quiere decir que se deba dejar de trabajar en los rubros que
muchos y muchas les da miedo, escozor, o más bien flojera. Eso de recorrer el
estado, ir de casa en casa en los diferentes puntos de Tabasco, así sea en la
ciudad o en la comunidad más alejada, la política o el político debe de estar
siempre cerca de la gente, pues ese es su respaldo, esa es su carta de
presentación y creo Ady ha sido muy congruente en ese sentido. Y ella lo sabe,
sabe que va haciendo su caminito y el que trabaja cosecha.
Por
lo anterior creo, tanto partidos políticos como actores inmiscuidos en esta
área, saben que son las características antes mencionadas, las necesarias para
crecer, para ganar en una contienda o en el último de los casos o el principal
de los casos, un boleto preferencial para entrar en las negociaciones e
inclinar la balanza a favor de unos u
otros.
A
diferencia de Ady García está Gina Trujillo, la diputada Federal por Tabasco.
Una
mujer con una imagen fuerte, y la única diputada federal en Tabasco que ha defendido
las reformas e inclusive en su intento por que la sociedad las comprenda, ha
realizado conferencias para hablar de los beneficios que éstas pueden traer a
la economía tabasqueña. El trabajo legislativo que ha hecho, ha ayudado a bajar
más recursos para Tabasco. Solo falta
concretar la lucha en materia energética, pero ahí la lleva.
Gina
Trujillo es hasta este momento la supuesta línea del partido tricolor, y en el trabajo de dejar sentada
toda la base o estructura en los puntos clave para poder llevar a buen puerto
su candidatura, se ha dejado ver muy
vulnerable ante la crítica, muy sensible ante los comentarios al interior y
exterior del partido, y esto a veces la
dejan ver con cierto grado de revanchismo y una ausencia de aparente
control.
No
omito manifestar que una mujer también debe tener carácter, sin embargo, las
formas y los modos son lo que en estos momentos la sepultan.
A
esta dama fuerte, le está faltando la humildad o así lo ha dejado ver, siempre
a la defensiva, siempre excluyendo con sus discursos a militantes o posibles
simpatizantes del partido revolucionario institucional que no comulgan con
ella. Lugar donde se planta, lugar que más de uno queda con un mal sabor de
boca, por su aspecto, frío y tajante.
Queremos
pensar que ella no lo sabe, que sus cercanos no han sabido aconsejarla, ven
moros con tranchetes o piensan que esa actitud es la que debe asumir la hija de
Don Mario Trujillo, y no es así, Gina anda mal, y si no se lo dicen sus
cercanos, es por miedo o porque no están comprometidos con su proyecto. Olvidan
que si bien es cierto, es importante que el tamalito se amarre arriba, también
es prioritario, se amarre abajo, pues si no se puede desfondar y desparramar
todo lo que han realizado hasta el momento.
Pero
por qué hablar de estas damas, de sus cualidades y defectos, pues bien, porque
son la muestra clara del poder y la política, de las mujeres trabajando por una aspiración, con diferentes
formas, pensamientos y estrategias, una más política que otra, y la otra más confiada
en la elite del poder, grave error en estos momentos, pues si algo será juzgado
por los ciudadanos será la humildad o la falta de ella.
Es
la oportunidad de Gina Trujillo de hacer alianzas, de unificar, de buscar la
unidad, etc. etc. (esa unidad que manejan en los discursos), debe de demostrar
que aunque las mujeres tienen diferencias, pueden trabajar juntas por el bien
común de la gente, pues visto está que el pueblo ya tiene sus candidatos, que
los han visto no de ahorita, ni de ayer, pues son líderes que se van
consolidando por su humildad y acercamiento constante con la gente, por su
trabajo, por su esmero.
Es
el momento de abonar a la lucha de las mujeres, de demostrar consenso,
civilidad, congruencia y no revanchismos falaces, es necesario dejar de calcar
las malas e indecentes estrategias de algunos hombres que hicieron de la
política algo común y corriente.
“No
somos santas, somos seres humanos, pero eso sí, más bondadosas”, diría Ady García, a lo que nosotros le añadiríamos,
y que son igual, algunas más congruentes, políticas, bonitas, bien arregladitas
y ni se dude inteligentes.