SE PRESAGIAN CAMBIOS EN EL AYUNTAMIENTO DE COMALCALCO… Sigue adelante el reinado May-Méndez
En medio de la cortina de humo provocada por el gasolinazo; en el ayuntamiento de la Perla de la Chontalpa, ya se habla, se maneja, y hay hasta quienes afirman, que Javier May Rodríguez hará cambios de camajanes en los puestos directivos.
He de decir que la actual
administración MORENISTA, sigue envuelto en diversos conflictos, el mayor de
ellos, la cuestión económica, ya no le alcanza a Javier el dinero, y ha tenido
que hacer frente a sus deslices tomando de donde no debe tomar, pero de esto
hablaremos en otras notas.
Por lo pronto, aseguran cercanos
al alcalde se acercan tiempos de cambios en la administración MORENISTA, esto
con el fin de perfilar al ayuntamiento a un 2017 eminentemente político, en
donde deberá disponer de gente leal al régimen que preside el divino Capu, para
así disponer de lo que haya que disponer.
Debido a eso, le urge, al
alcalde, tener a su lado gente “confiable”, que le permita hacer los
movimientos asertivos e igual con ese pretexto, tal parece, posicionar, entre
el aparente caos, a la gente de Lorena Méndez Denis, su musa, su creación, su
inspiración, su ¡azuquita mami azuquita!, su gallina para el 2018.
Cabe mencionar, que apenas el
martes sacamos a relucir el “compló”, o el complicado escenario que tenía
MORENA, debido al corazón enamoradizo del alcalde, y hoy la razón, tal parece,
llegó sola, delatando la verdadera intención y sentimiento de Javier May
Rodríguez y sus triángulos amorosos, digo armoniosos.
Los cambios que vienen, en la
alcaldía de Comalcalco, según los chismosos, que no tienen nada qué hacer, son:
En Desarrollo, regresará Víctor
Correa, quien dejará la Dirección de Administración a un dama, que más adelante
develaremos su nombre.
En Ecología, quien llega es
José Medel, bajando a su vez, a Domingo Arévalo a la Subdirección.
En Seguridad Pública, Se va
Frijolito y viene Arrocito, jiar, jiar. Disculpen, un chascarrillo. Pero como
decía se va Frijol, y llega Chema Madrigal, quien según dicen, y no me explicó
por qué, entrará en funciones el primero de febrero, cosa que no creo, si se
va, se va de un tiro, no de a poquito en poquito.
Estos cambios, inclusive las pitonisas
y brujos de Aldama y Tecolutilla, mencionan es para posicionar la corriente de
la incondicional del presidente, de nombre Lore, una dama que sigue caminando
al interior del municipio, que avanza, que nada la detiene, que camina con la
venía del divino Javier May, y con el consentimiento dicen del mismito Andrés
Manuel López Obrador, quien ya la bautizó, e inclusive los profetas del
movimiento le dieron el visto bueno, y le llaman: “La Doña”.
Sin dudarlo, el reinado de los
chocolatozos M&M, May y Méndez, ha empezado, y no hay ser humano que se les
plante enfrente, o que intente detenerles, tan es así, que otro cambio que tal
parece, es bola cantada, es en la dirección de administración, y con la salida
de Víctor Manuel Correa, quien se va a la Dirección de Desarrollo, llega, nada
más y nada menos que Martha Fabiola Méndez Denis, hermanita de mi candidata,
digo, de la aspirante a la alcaldía de Comalcalco, por Morena, Lorenita Méndez.
Pero no nos adentremos más en
nuestros comentarios, vayamos a paso de tortuga, pues ya ahondaremos cuando la
profecía esté en plena acción.
Por lo pronto, junto con estos
cambios, vienen despidos en el ayuntamiento que preside la familia Javi-Lore, y
se hablan de 260 cristianos que deberán ser liquidados, en el buen sentido de
la palabra, de todas las áreas, pues ya al alcalde no le da, máxime que su gran
obra para los comalcalquenses son los vales de gas, de carne, dicen, querían
implementar el de gasolina, pero por culpa de Peña, todo se vino abajo, y he de
decir que al final los que venimos pagando los platos rotos, no solo del PRI,
del PRD, MORENA y demás, somos los mismos jodidos de toda la vida, es decir, el pueblo.
En fin, por el momento, el
gobierno de la esperanza y la honestidad valiente y la corrupción cobarde, se
adapta a los cambios, no precisamente por el gasolinazo, sino por el
capulinazo, que piensan dar (y que están dando) en el 2017, y en el 2018, electoralmente y económicamente
a las arcas del municipio. Aunque no sé si voy bien o me regreso.