SE ALIÓ LA LAGARTADA EN TORNO A LILIANA MADRIGAL
Hasta el tiempo, el día de hoy se
deprimió. No hubo lugar para la cordura, sí para la imaginación y para eso que
ellos llaman con total orgullo, política. En el registro de la candidata del
PRI y sus aliados, se vio a la lagartada mayor, abrazándose, besándose, moviendo
la cola y sonriendo, siempre sonriendo, para la foto, para el porvenir, para los tiempos, para que el mensaje quede
claro, a quien deba quedarle claro, “LA CLASE POLÍTICA” está con Liliana
Madrigal, van de la mano, y sus pesares, sus dolores, sus arrebatos, sus
tribulaciones, son desechados, en vísperas del día de San Valentín, y en pro
del triunfo que dicen representa su musa para la elección de marzo por el municipio
del Centro.
Este fenómeno político que se
vivió este día, debe quedar bien grabado en la memoria de esos priistas fanáticos,
y debe hacer cavilar aún más, a esa corriente pensante y crítica que en buena
fortuna ostenta igual este partido. Pues a veces, como ciudadanos, como seres
humanos más pueblo, que políticos, debemos ser renuentes a que en pleno siglo
XXI, ante la crisis política y la exigencia a los partidos de ser mucho más congruentes
y renovarse, sigamos viendo y “viviendo en carne viva” la resurrección de corrientes
priistas de hace 10, 20, 25 años, las cuales debieron ceder espacios a nuevas y
mejores prácticas, menos dañinas y encaminadas a la demanda de una sociedad que
desde hace años dejó de ser la que Madrazo, Mayans, Evaristo, Andrade, Núñez y
demás, un día encampanaron, o en su caso gobernaron de una manera u otra.
Pero nos robaron, o nos dejamos
robar, el futuro, y en este presente se puede palpar de cierta manera, que
estamos dando un supuesto cambio, solo que de 360 grados, es decir damos la
vuelta en círculos, y que no ha sido posible alejarnos del ayer, sino todo lo
contrario, en cada paso que hemos dado, nos hemos ido acercando más, al mismo
lugar, donde empezamos.
No quiero parecer devastador, ni
mucho menos totalitario. Lo que escribo es debatible, es un punto de vista que
asumimos desde una postura ciudadana, social, como gente de pueblo, por lo
mismo, habrá quien argumente que Liliana es una mujer joven, que no lleva los
10, los 25 años a como los aludidos con anterioridad, pero realmente Liliana,
solo es un espejismo, una consecuencia de una negociación, no con las nuevas
generaciones, no con la militancia, no con la sociedad, o con la responsabilidad
del PRI y PVEM, PANAL o con el pueblo tabasqueño, sino más bien con los grandes
dinosaurios, de pareciera, toda la vida.
Por si fuera poco, esto que hoy
vive el PRI y la imposición de Liliana Madrigal, se asemeja demasiado,
infinitamente, a lo que se vivió con Jesús Alí, cuando buscó la gubernatura y
la perdió, es decir se siente en el ambiente un aire de simulacro, como que no
es real, como que es una pantalla, un escenario con malos actores, un proyecto
que se ve terminará trunco, en el hueco, en la lona. La desconfianza está en
cada resquicio de la información que ellos mismos propinan, en el dialogo con
sus jóvenes, con sus mujeres, con sus guías, en el día a día, y en la verdad
que Liliana misma sabe, no levanta. Pero los sometidos, los adoloridos, los que
no tienen otra que jugársela con ella, asemejan a caballos que con una pañoleta
en los ojos, son guiados por sus domadores; y por lo mismo, por mansos, han
aprendido, a perder el miedo a la oscuridad, pero esta vez el nerviosismo es
palpable, conocen y muy para sus adentro recuerdan los tropiezos, los bajones,
a los que han sido sometidos por la cúpula del PRI, por eso el rumor de la
derrota, que llega a ellos, tiene el mismo aroma, quizá sabor de fatídicos días
de simulaciones.
La mirada les delata, y no es
para menos, priistas de Comalcalco, priistas de Macuspana, de Jalpa, de Teapa,
de Cárdenas, aparentemente de todo el estado, y un shishito, un triste shishito
de Centro, es una romería, si hoy la elección de Centro la llegasen a hacer
estatal, Liliana Madrigal la gana, porque los priistas de fuera se ve no dudarían
en brindarle su apoyo, pero esperemos por el bien del PRD y de mi abuelito Arturo Núñez, no sea así y
los del municipio de Centro voten por el candidato que les conviene.
El IEPCT es un torbellino de
emociones, Liliana se ve nerviosa, un tanto incomoda, mientras es llevada de un
lado a otro, entre besos, abrazos, fotos, y una sonrisa que parece una cicatriz
en su rostro.
Jesús Alí, es otro a quien siguen
las cámaras, Chucho anda pataleando desde hace rato, de vez en vez, llega a
Comalcalco ya ni a hacer campaña, solo a visitar a los 15 amigos que logra
reunirles Grabur y que además se toma fotos con los mismos. Pero ésta vez, tal parece, negoció algo grande, por
consiguiente ha tenido que disciplinarse, aunque se diga brioso, no bronco,
brioso, debe bajarle dos rayitas a su aspiración, y aguantar incluso el tener
que tenderle la mano a Mayans, e inclusive el tener a un lado al diablo ese.
Parece que desde que se fue Erubiel, no hay nadie a quien echarle la culpa de
las estupideces que se siguen cociendo en el partido. Es más pareciera que
Erubiel impedía que los lagartos se apoderaran por completo de estas tierras
bajas que el CEN del PRI ve como mal negocio.
Mayans, por su parte, es el divo,
si debiéramos compararlo con algún artista de los tiempos del cine de oro, no dudaríamos
en afirmar que él viene siendo la María Felix del PRI tabasqueño, y que Madrazo
Pintado es el flaco de oro, y que esto que vemos en el IEPCT es una vieja
película en blanco y negro, que bien puede llamarse “VICTIMAS DEL PECADO”. Pero
no echemos a volar la imaginación, quedémonos en tierra firme, en donde la
ficción se apoderó de la política o viceversa.
Roberto Madrazo, es el artista,
el creador, el que las compone en el aire, y verlo gozando lo que para muchos
es su obra, que dividió en tres o cuatro actos, es grato a los ojos. A él van
las palmadas, los aplausos, la algarabía, los abrazos, las miradas, las
felicitaciones, los señalamientos de bajo de la mesa. El mismo Andrade quien el
año pasado, como si se tratase de un chiste coloquial, de colmo, le traía una “madriza”
a Madrazo en el D.F., se le vio cariñoso, bondadoso, amoroso, un gato runruneándole
a los pies del amo.
Detalles, simbolismos, por donde
quiera, en aquel lugar, en el registro como candidata de Liliana Madrigal,
hasta una flatulencia era minuciosamente observada, decodificada, “analguizada”
hasta el extremo, pero a pesar de eso, las pillerías no faltaron, una de esas,
de niveles jerárquicos, de camajanes y bandidos, fue el hurto de la cartera, que
sufrió el pollo, el párvulo, el inocente, el candidato a regidor Luis Salinas
Falcón, de ese tamaño fue dicha reunioncita, puros capos de colmillo largo y
retorcido, por lo mismo debe quedar bien grabada en la mente este momento, pues
reunir a tanto canijo, no es fácil, si lo sabrá Tabasco.
Muchos más detalles que comentar,
en este show mediático que se ha convertido el PRI, en donde se espera, el
respaldo sea meramente, económico, ni sentimental, ni moral, ni espiritual, ni
de buenas intenciones, con eso nadie gana, en Tabasco si el viejo PRI quiere estar
en la pelea, deberá invertirle, deberá hacer algo mucho más que un desfile de
pasadas modas que en estos años ya no van, ya no quedan.
Quienes imaginamos han de estar endiablados con sus pluris son Katia Ornelas, y René López Ovando, pues en apariencias la tienen de a pechito... nos faltó Gina pero de ella hablaremos en otro alucine... Aunque no sé si voy
bien o me regreso.