NO ANDABA MUERTO, ANDABA DE PARRANDA

Hace 21 días desaparecimos podemos decir de la opinión diaria, ni adiós dijimos, y nos embarcamos a la aventura de ir a Monterrey, y salir del circulo vicioso de la política, y dignificarnos un poco, esclarecer nuestras ideas y oxigenar nuestro cerebro, y de pasada hacer un trabajo de campo entre la clase oprimida en la cual día a día habemos más.

Actualizarnos es importante, no solo profesionalmente, sino también en el día a día, con la gente, con el pueblo, es la obligación de quienes nos dedicamos  a plasmar un comentario, quienes opinamos abiertamente de temas candentes en el espectro social, político, etcétera.

Y al decir: “dignificar”, lo mencionamos desde una visión meramente profesional, y bajo el argumento de seguir siendo independientes, y conscientes a la hora de escribir, tratar de hablar con la verdad, aunque se nos vaya la clientela en el intento.

Por lo mismo creo en estos tiempos tenemos que intentar rescatar nuestra individualidad y nuestra identidad. Sin omitir por eso el compromiso con la sociedad, es uno de los retos de quienes nos dedicamos al periodismo de profundidad, y sino riguroso, si un tanto responsable. Esto no quiere decir que todos deben hacer lo mismo que un servidor, nada de eso, yo no digo ninguna verdad, solo manifiesto mi sentir en cuanto a lo que vivo, para generar quizá un mayor debate sobre estos temas.

Por consiguiente si debemos ser libres como periodistas, debemos basarnos o emplearnos en algo más que nos permita ser lo que queremos ser, lo que al final creo yo, nos conviene ser en este mundo de la información.

Es por eso que debemos (insisto a mi parecer) dignificarnos,  pues a veces quienes están metidos en el poder están mal acostumbrados, o piensan que algún día iremos a pedir chiche, o que nuestra debilidad está en nuestra condición, en nuestra carencia, cuando debería ser todo lo contrario. Y siendo aún más sinceros, de eso uno como periolisto se llega a hartar, más aun si no se nos inculcó, o se nos enseñó a ser endebles o entregados con los que manejan las arcas del poder.

Pero aquí estamos de vuelta, en nuestro querido Tabasco, en donde ha pasado de todo un poco, y en donde seguiremos dando lata de manera regular.

Antes de concluir debo agregar, que agradezco de corazón, a quienes preguntaron por este su servidor, quienes anduvieron haciendo polvo, quienes pensaron cosas buenas y malas, quienes pensaban que ya habíamos dejado todo, en verdad gracias. A veces uno no dimensiona las cosas, no alcanza a comprender quienes no nos leen y quienes sí lo hacen, uno escribe, lanza sus comentarios al internet, a las redes sociales, como quien lanza una red para pescar, y aunque pareciera no agarramos nada, poco a poco hacemos consciencia y formamos opinión…

El por qué no escribía desde donde estaba, se debe principalmente a que trabajaba 12 horas diarias, y donde llegaba a dormir ni internet había, pero aun así seguimos haciendo la chamba, y realizamos una que otra entrevista, así como comentarios sueltos sobre Tabasco visto desde Monterrey. Y todo esto lo iremos subiendo a nuestro blog poco a poco, a nivel campesino, y como siempre tratando de no meternos en donde no, nos llaman.

Reitero las gracias, y empecemos, que las vacaciones ya terminaron.