EN TABASCO LA CASTA POLÍTICA SE DOBLEGA A MORENA, O FUE AL REVÉS VOLTEADO
Aunque las siglas han cambiado,
las caras son conocidas, viejos lobos de mar que siguen bregando en las aguas
turbulentas de la política tabasqueña. Y que en pleno cambio de “joderes”
surden entre la chusma y la naciente primavera Obradorista. En estas tierras
paradisiacas ya no importan las apariencias, ya no más las fronteras ideológicas
y partidistas, ni esa podredumbre de la mafia del poder.
La mafia política fue redimida, todos
obtuvieron su salvo conducto, incluso fulano, mengano y perengano, hasta el
propio hijo del Ciclón del Sureste, quien bajo una postura lamentable y ridícula,
desempolvó el pasado, y se puso en cuclillas ante el nuevo amo de la nación.
“La tendencia en mis actas era
positiva para Andrés Manuel, en las del PRI, no sé”, comentó Roberto Madrazo al
ser entrevistado por Emmanuel Sibilla sobre si López Obrador había ganado esa
elección. Además aseguró que a pesar de los años no había hecho pública esta
información porque habría implicado “dinamitar la vida democrática” de las
instituciones y del país. “Además me faltaban datos para asegurar que Andrés
Manuel había ganado, pero la tendencia le favorecía”.
Recordemos que el proceso
electoral del 2006, el candidato del PAN, Felipe Calderón, obtuvo 15 millones
284 votos, contra 14 millones 756 mil de Andrés Manuel López Obrador, mientras
que Roberto Madrazo obtuvo 9 millones 301 mil.
Pero de aquella elección del 20
de noviembre de 1994, y del desalojo del 19 de enero de 1995 en plaza de armas
donde pernoctaban los perredistas liderados por Andrés Manuel, no hubo mayor
detalle por parte de Roberto Madrazo, aquello pasó desapercibido, como un hecho
sin mayores consecuencias, como un tema donde no hay nada que contar.
Es pues que cada quien a su manera, doblegó
las manitas ante el nuevo orden de gobierno, que más bien las dio sin pena ni
gloria. Las fotografías de la toma de protesta en el municipio del Centro y en
otros municipios de mayor representatividad política y económica, fueron
contundentes, definitorias.
Nadie quiere estar fuera del presupuesto,
nadie quiere pasar 3 o 6 años en la banca, haciéndola de héroe, de valiente, o
de una “oposición responsable”. El político o se adapta o se muere, un buen
ejemplo de ello es el mismo Andrés Manuel.
Como conclusión he de decir que a
mi parecer, repito, desde mi perspectiva los políticos de ayer evolucionaron, o
más bien, con el triunfo de MORENA, terminaron de adaptarse a los cambios que
pedía la ciudadanía existiera en la política y en el poder.
Así con el pasar del tiempo y las
elecciones, nuestros políticos se adaptaron y dejaron atrás prejuicios,
limitantes ideológicas, mudaron de piel y se hicieron resistentes al medio
ambiente que les rodeaba, se hicieron invulnerables a la ponzoña democrática,
al hartazgo de la gente, justo a punto de la extinción.
Tan vivos están, que se les
observa saludables, rollizos, sonrientes, no sólo en ese partido que lo ganó
todo en México, sino también al momento de estrechar la mano de un “nuevo”,
paradigma político.
Perredistas, panistas, priistas,
tal parece nadie quedó fuera de un gobierno que ha prometido las perlas de la
virgen a un pueblo demasiado cansado y demolido, pero entre este festival de
emociones, entre la algarabía de la buenaventura, yo me pregunto ¿nos jodieron, o los jodimos? El
tiempo será el mejor juez, por lo pronto la clase política tabasqueña se
doblega ante MORENA… ¡VIVA EL REY, MUERA EL REY! Aunque no sé si voy bien o me
regreso.