GRÚAS GARCÍA LA PIEDRITA EN EL ZAPATO DEL ALCALDE DE PARAÍSO
La verdad, el alcalde de Paraíso Antonio Alejandro Almeida,
quien es conocido por el sobrenombre de Toño Caldo, se pasa de buena onda, y
eso, más que un atributo, es una debilidad.
Está sometido a quienes en un momento dado, le apostaron a
su campaña, sin embargo, debe saber que existe un límite, pues su deber está
con la población, por esos paraiseños que siguen esperando haya un verdadero
cambio en el municipio.
Por qué escribo lo que escribo, porque Grúas García,
propiedad del conocido maestro Uriel, luego de tener las preferencias en el
traslado y remolque de vehículos en Paraíso, ha empezado a mandar por un tubo
toda posible indicación del alcalde.
Así nos lo han hecho saber usuarios de esta misma, pues
aunque hay otras empresas dedicadas a al servicio de grúas, la orden está
clara, todo va a favor del maestro Uriel. En fin que quienes han tenido la mala
suerte de ser remolcados por Grúas García, han acudido con el alcalde Antonio
Alejandro Almeida, para tratar de que el cobro disminuya, y muy a pesar de que
el presidente de Paraíso da la orden. A la hora de ir con la empresa consentida
de palacio, resulta que hasta más caros les cobran.
Es aquí en donde la misma ciudadanía se pone a pensar, si de
qué sirve a los paraiseños que haya una empresa favorecida, que se está
enriqueciendo a costa del poder, sino obedecen una orden directa por parte del
presidente, y si cobran en absoluto precios estratosféricos, sin beneficiar en
nada a la ciudadanía.
¿A caso ya se le olvidó al profesor Uriel, que la autoridad
en Paraíso es el alcalde? ¿A caso cree que él que puede estar por encima de
Toño Caldo? Sí su pensamiento es así, entonces el presidente de Paraíso debe
replantear quienes son sus aliados y quienes no lo son. Pues en el municipio está
en una grave crisis, la peor que ha pasado por muchos años, y que muy a pesar
de la refinería, muy a pesar de ser una zona petrolera, muy a pesar de tener
dos bocas, y ser de cierta manera ser turística, todos ven que se está en un
bache del cual no salen, sino se entierran más.
Grúas García desde hace mucho está dañando la credibilidad,
o la poca credibilidad que el alcalde debiera tener, y no es invención, pues ya
no es un secreto que no los puede llamar al orden, sino que incluso no puede
siquiera ser un poco más abierto y plural para con las demás empresas.
Al presidente municipal se le olvida, a conveniencia quizá,
a lo mejor por tener muchas preocupaciones, que
los preceptos de morena son claros, son definitorios, ir en contra de
las viejas prácticas, derrumbar las acciones mafiosas y gandallas y favorecer
un mejor equilibrio, una mejor competencia en el lugar donde se gobierna.
Ahora si se trata de reunirle al maestro Uriel lo que aportó
en campaña, creo le conviene más al alcalde, pagarlo en una sola exhibición,
que cederle todo lo ancho y lo largo, a quienes ya ni caso le hacen. Seguiremos
informando. Aunque no sé si voy bien o me regreso.