ANTONIO ALEJANDRO ALMEIDA y FANNY SANTOS VS REGIDORES EN PARAÍSO

Por mucho que le manifieste el gobernador Adán Augusto López al presidente de Paraíso que está protegido, casi, casi blindado luego de su salida de palacio municipal, lo cierto es que Toño Caldo, será lo que quieran, pero no es pejelagarto de ahorita.


Intuye (Alejandro Almeida) que lo único seguro en estos momentos es tratar de salvaguardar su salida desde ahorita, cuando está a meses de irse y dejar un ayuntamiento de cabezas, pero para lograrlo deberá por lo menos, medio maquillar las cosas, y para ello deberá contar con el auspicio de esos regidores que tiene en su contra, a esos regidores que maltrató, que hizo de menos y de quienes pensó jamás necesitar.


Su talón de Aquiles, a meses de que todo termine, es precisamente ese, los benditos regidores del ayuntamiento de Paraíso. Y no es para menos, según nos han informado, la gran mayoría no le han firmado ninguna de sus tomas de decisiones, ni le han seguido en sus alucines, pues más de una vez les mintió, y los trató con la punta del pie. Creyendo que eran unos empleados más en el ayuntamiento, creyendo que a nadie le rendiría cuentas. 


Pero conforme han pasado los días, Toño Caldo el aún alcalde de Paraíso, se ha dado cuenta que Adán Augusto no es una garantía, ni tampoco lo son los nuevos diputados locales de morena, ellos, están sujetos a los designios del presidente de la república. Quien sin miramientos y para calmar a sus críticos y a sus malquerientes, no dudará en mandar a una fría celda a personajes de dudosa procedencia política, que no representan nada, ni a nadie, tal es el caso del alcalde de Paraíso, Cunduacán, Centro, y quien se atraviese en el camino.



Por eso Toño Caldo, junto con Fanny Santos, incluido el secretario del ayuntamiento andan buscando la manera de que los regidores firmen las actas y todo el desbarajuste y actos de corrupción que se gestaron en los 3 años, sin embargo, la mayoría no ha cedido a sus demandas. Y como lo expusimos en la pasada columna, son solo 3 regidores que están a favor del hoy aún alcalde Paraíso, como lo es la regidora Fanny Santos, quien incluso, han señalado los mismos regidores anda amenazando y presionando a todos. Tal es el caso confirman al interior del ayuntamiento, del regidor Santiago Uzcanga, a quien según dijo Fanny si no firma las actas, va a ser remitido de manera expresa con el gobernador del estado… ¡Hágame usted el favor! Una amenaza fuera de proporción, pues en primera sabemos que el municipio es autónomo, y en segundo lugar, el gobernador no se prestaría a mandar a intimidar a los regidores de Paraíso para que le autografíen las actas a Toño Caldo.


Eso sí, viendo que no pueden sacar al regidor Carlitos, ya están confabulando el siguiente plan, y es el emular viejas practicas, como cuando, en administraciones pasadas para sacar a un regidor de apellido García, sino me equivoco, traspapelaron las cosas, y sacaron documentos de dudosa procedencia, y hay quienes manifiestan se atrevieron a falsificar la firma de ese regidor que era incomodo a la administración.



Pues lo mismo quieren hacer los amigos de palacio municipal en Paraíso, no solo para sacar al regidor incomodo Carlos Gallegos, sino también para pasar encima de los regidores en contra, y así tratar de salvar el pellejo. 


¿Entonces qué onda agarra Fanny Santos?



Pero esto no termina aquí, viendo que los tiempos son cortos, y que Anita Castellanos está más puesta que un calcetín para que se haga una minuciosa auditoria a esta actual administración morenista, Toño, Fanny y Edilberto, han planeado para tratar de equilibrar la balanza volver a meter al ex regidor Chucho Trinidad, quien cabe agregar, dejó el cargo de regidor para ir por una diputación local que perdió, y a quien se le venció el plazo que marca la ley para regresar a su puesto de regidor, esto porque pasó más de 90 días deambulando por esa aspiración que le costó caro y le dejó fuera de la jugada.


Sin embargo valiéndoles una pura y dos con sal, de la mano de Fanny Santos, intentan traerlo de vuelta, para asegurar las dichosas firmas, pero ya no será tan fácil, pues el líder Carlos Gallegos está definido a no dejarse pasar por encima, y junto con los demás regidores, están cerrando filas para que Toño Caldo y compañía no se pasen de la raya y no precisamente de la raya de Paraíso.


Aquí vuelve a surdir la figura del gobernador, pues según Toño Caldo y sus cercanos manifiestan, es el propio gobernador Adán Augusto quien está detrás de esta grosería y chocantés, sin embargo esto es solo un planteamiento mal hecho por un alcalde morenista que en Paraíso hizo mal las cosas y quien hoy, sin vergüenza alguna quiere manchar, la ya de por sí maltrecha y corroída investidura del gobernador, el cual solo tiene unas “pringuitas” que son por el uso continuo del poder, no porque sea pillo, o porque esté coludido con Toño Caldo, aclaro.


En fin que el  peor aliado para Toño Caldo y esbirros en estos momentos, además de los regidores, es el tiempo, y Fanny lo sabe muy bien, pues a la hora de la hora, cuando llame el OSFE a aclarar cifras, a aclarar gastos y desvíos, serán ellos, el secre del ayuntamiento, el de Finanzas o contraloría, al propio presidente y demás quienes deberán dar la cara.


Por lo pronto, ya hay quienes empiezan a distanciarse de Toño Caldo, incluso ya hay quienes tienen documentos y foto copias de sus desmanes, es decir, la derrota del pasado 6 de Junio ha generado un efecto en contra de un personaje polémico, de reputación dudosa, que se enriqueció junto con sus cercanos y uno que otro familiar de la noche a la mañana.



Ojalá, uno de los regidores que aquí señalamos, se atreva a hablar, que rompa el silencio, y que exponga lo que deba exponerse. Como por ejemplo sería excelente y dejo la invitación abierta al regidor Carlos Gallegos para la realización de una entrevista, y tratar este tema en específico, que es de mucha importancia para la ciudadanía y que deberá quedar como una prueba para las investigaciones venideras por parte de las autoridades correspondientes. Por lo pronto seguiremos informando, aunque no sé si voy bien o me regreso.

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